Casi todas las culturas guardan en su seno historias de sociedades secretas, magia y esoterismo. Supongo que tiene que ver con la ambición humana de lograr la iluminación, el poder económico o político o, simplemente por el deseo de llegar a la verdad. Las invasiones y conquistas casi nunca han logrado destruir las creencias mágicas originales de los pueblos. Como mucho las han obligado a camuflarse para volver con otros signos, pero los mismos principios. Es el caso de la influencia cristiana en las antiguas religiones americanas o africanas. La presencia de gurúes, brujos y hechiceras no ha desaparecido con los siglos. Las sectas, logias y organizaciones para iniciados siguen vigentes y en algunos casos ostentan un enorme poder. Todo este mundo paralelo a la realidad lisa y llana da un extenso abanico de temas y situaciones que nosotros, los escritores, utilizamos en nuestras obras.
Es innegable que existe el mal, la gente buena y la malvada. En muchas ocasiones quienes ostentan poder de cualquier índole se deleitan provocando sufrimiento en seres inocentes o indefensos. Debo confesar que creo firmemente que todos tenemos ese gen «maléfico.» Lo desarrollamos en mayor o menor medida de acuerdo a las circunstancias, la educación o la voluntad.
Aunque suene un tanto brutal, creo que la sociedad humana está constituida en gran parte por depredadores y depredados, personas que pedalean para salir adelante y otras que ponen palos en las ruedas.
A mí me encanta inventar historias en las que quienes depredan acaban finalmente depredados. Quizás sea porque aun creo inocentemente en algún tipo de justicia divina.
Es la ventaja del novelista y en muchos casos el consuelo del lector.
En mi último trabajo me he propuesto enfrentar la magia indígena con las sociedades secretas occidentales. Con seguridad ya sabéis cuál parece ser la poderosa y cuál la débil.
¿Estáis seguros?
No siempre lo evidente es lo acertado. Recordad que hay muchos animales que imitan a una víctima para atrapar a su presa.
Creo que será una novela muy interesante de leer. Tendrá como casi todo mi trabajo un punto de crítica social y una visión particular de la realidad que nos hará pensar.
La historia contiene muchos detalles verídicos e incluso alguna experiencia propia. El desenlace: totalmente inesperado.
Bien, agregaré algunos datos más cuando se acerque el lanzamiento. De momento apuntaros el título para que no se os olvide:
